Casa de América analiza las oportunidades de inversión en la región

CAF – Banco de Desarrollo de América Latina organizó en la sede de Casa de América en Madrid la conferencia “Infraestructura para la Integración de América Latina”, que reunió a ministro de Economía, Finanzas y de Planificación, representantes del sector privado y expertos españoles e iberoamericanos.

Como señaló el presidente ejecutivo de CAF, Luis Carranza, “la infraestructura juega un rol clave en la integración física y funcional” de la región, he hizo hincapié en “las brechas en infaestructuras que existen hoy en América Latina, desde agua y electricidad a transporte, logística y telecomunicaciones, sectores donde se debe duplicar la inversión sobre PIB si queremos converger con los países líderes en Asia y Europa”.

De hecho, sólo en los sectores de transporte y telecomunicaciones los proyectos y programas que se ejecutarán en Iberoamérica a lo largo de la próxima década supondrán una inversión cercana a los 118.000 millones de dólares. Con un 6,9% del PIB, Perú es el segundo país de la región con la tasa de inversión en infraestructura más alta después de Bolivia.

La conferencia contó también con la presencia del ministro español de Fomento, José Luis Ábalos, quien aseguró la colaboración del Ministerio con el sector privado a la hora de abordar las iniciativas en infraestructuras. “Es importante el apoyo y colaboración con la empresa española, que tiene gran desarrollo internacional”, señaló. El ministro aseguró ser “partidario de la revitalización de la Comunidad Iberoamericana de Naciones como puente de colaboración con Europa y no sólo desde el punto de vista afectivo e histórico sino en el político y económico, en concreto en el sector de las infraestructuras”.

Ana de la Cueva, secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, indicó en su intervención la importancia de construir alianzas público-privadas: “Es necesario que el enfoque tradicional de financiación se complemente con la movilización de capital privado”, afirmó. “Es indudable que las inversiones de empresas españolas junto con las de instituciones financieras multilaterales como CAF han conseguido cerrar la brecha vertical en infraestructuras en la región, con el consiguiente impacto positivo en el bienestar económico y social”.